En 2010, conceptualicé y puse en marcha un proyecto piloto para facilitar la conexión a Internet en zonas marginales y zonas rurales marginales. La comunidad ICT4D, junto a varias organizaciones internacionales, llevaba tiempo discutiendo sobre el poder transformador de Internet en la vida de las personas, pero casi todas las soluciones parecían ser verticales o estereotipadas.
Mi idea era sencilla: colaborar con un socio local para buscar una ubicación rural en la que facilitar la conexión a Internet marcase una diferencia para la gente, asegurarse de que la comunidad recibiera formación para explotar y mantener la red (en lugar de depender de terceros), utilizar equipos WIFi baratos y fáciles de encontrar (si algo se rompe, en el pueblo de al lado puede haber recambios) y después, educar a la comunidad para crear y utilizar diferentes servicios digitales. En esencia, se trataba de una red para la gente, desarrollada por la gente.
Así nació nuestra galardonada iniciativa Wireless For Communities (W4C). Hemos tenido un éxito rotundo con este programa, con el que hemos instalado cientos de redes en el sur de Asia y hemos ayudado a que las comunidades más marginales puedan acceder a Internet. También se ha convertido en un programa global para Internet Society (que ahora es nuestra incitativa Redes Comunitarias) que se ha aplicado a lo largo y ancho del mundo.
Disponer de una red es una cosa, pero saber qué hacer con ella es otra bastante diferente. Por este motivo, nuestros proyectos en Asia-Pacífico siempre han puesto el énfasis en el uso que puede hacer la comunidad de las aplicaciones y servicios que permite Internet para que puedan mejorar sus condiciones socio-económicas.
Se dice que la imitación es la forma de adulación más sincera. Y de hecho, desde que empezamos a trabajar hace 10 años, no son pocas las personas (incluidas agencias donantes) que han apoyado esta forma de redes complementarias de acceso local, y me siento verdaderamente satisfecho de ver cómo se han ido desarrollando con el tiempo.
Mañana celebraremos, junto a nuestros socios de la Comisión Económica y Social de las Naciones Unidas para Asia y el Pacífico, la Cumbre de Redes Comunitarias Asia-Pacífico como parte de la tercera sesión de la reunión del comité de dirección de la autopista de la información Asia-Pacífico (AP-IS, por sus siglas en inglés).
En esta cumbre especial participarán todas las partes interesadas en compartir sus experiencias y conocimientos sobre redes locales y buscaremos formas de ayudar a mejorar la vida de la gente de nuestra región. Se trata de un trabajo de colaboración con la AP-IS, una iniciativa regional promovida por los estados miembro de la Comisión Económica y Social de las Naciones Unidas para Asia y el Pacífico,, y en particular, con la iniciativa fundamental «Banda Ancha para Todos» de la AP-IS que busca formas de promover un acceso asequible en zonas marginales.
Siento un placer especial al ver que algo que empezó hace 10 años como un proyecto piloto ha sido capaz de conectar a los desconectados y abrir una pléyade de oportunidades de desarrollo socio-económico para personas de todo el mundo.
Descubre cómo las redes comunitarias ayudan a cerrar la brecha digital.
Créditos de la foto: Atul Loke/Panos Pictures para Internet Society