Según la base de datos mundial de IXP, en enero de 2021, de los 630 puntos de neutros de Internet (IXP, por sus siglas en inglés) registrados, 229 están en Europa, 126 en América del Norte, 140 en Asia-Pacífico, 96 en América Latina y el Caribe (LAC, por sus siglas en inglés) y 39 en África. Aunque la región de LAC es la penúltima de la lista, se ha producido una fuerte expansión de los IXP en los últimos años. En 2016 solo había 60.
A finales de 2019 y a lo largo de 2020 se incorporaron cuatro nuevos IXP a la Asociación de Puntos Neutros Internet de América Latina y el Caribe (LAC-IX, por sus siglas en inglés). Se trata del IXP.GT (Guatemala), IXSY (Yucatán, México), IX.DO (República Dominicana) e IXSal (El Salvador). Son el fruto del trabajo conjunto y continuo de Internet Society, LACNIC y LAC-IX en el marco de un acuerdo de colaboración para fortalecer la infraestructura de Internet en la región.
Guatemala
De los cuatro nuevos, el más desarrollado es el IXP.GT de Guatemala, que comenzó a intercambiar tráfico en noviembre de 2019. Sus 10 organizaciones participantes ya superan los 4 gigabytes por segundo (Gbps) de tráfico medio.
“Antes del IXP, se tardaba entre 30 y 40 milisegundos en recibir contenidos, pero ahora se tarda 2 milisegundos o menos”, dice Marco Antonio To, ingeniero, profesor y presidente del IXP.GT. “Con esta menor latencia, el usuario siente que Internet funciona mejor”.
Entre sus participantes se encuentra Señal Nacional, el tercer proveedor de conexiones residenciales a Internet de Guatemala: “¡El IXP es lo mejor que nos ha pasado en 2020! Desde que nos conectamos al IXP.GT en agosto, hemos duplicado [o triplicado] el ancho de banda medio que pasa por el IXP”, afirma el ingeniero y director de proyectos Ariel Tello.
Dice que lo que motivó a su ISP a unirse fue la conexión con Google Global Cache, que les permite almacenar copias de vídeos de YouTube y aplicaciones de PlayStore localmente, liberando el tránsito internacional y mejorando el rendimiento. Dice que esto les ha ahorrado al menos un 15 % en los pagos a los proveedores internacionales de servicios de Internet, lo que les ha permitido mejorar sus precios y su capacidad. En julio, un cliente con un plan de descarga mensual de 1 Mbps pagó 149 quetzales (19 dólares). Ahora, pagan ese precio por el triple de descarga (3 Mbps).
Se está instalando un nodo de Facebook (el primer Punto de Presencia (POP, por sus siglas en inglés) en Centroamérica) y se están negociando conexiones con Cloudflare, Akamai, Netflix y otras redes de entrega de contenidos (CDN, por sus siglas en inglés), con la ayuda de LAC-IX. Los POP hacen que dos o más redes o dispositivos de comunicación compartan una conexión.
Tello añade que si los costes se reducen aún más, este ahorro permitirá a su ISP invertir en la ampliación a más lugares sin acceso a Internet.
El IXP.GT también da más seguridad al permitir que los datos confidenciales se queden en el país. Aunque los dos mayores operadores de telefonía móvil aún no se han unido, To espera que esto cambie con la presión de los bancos, que planean exigir a sus proveedores que se unan al IXP.
México
A pesar de ser el segundo país más poblado de América Latina, a finales de 2019 México solo contaba con un IXP establecido, CITI, en tres localidades (Ciudad de México, Querétaro y Tultitlán). En comparación, Argentina y Brasil tenían más de 30 cada uno. En el sureste de México (que tiene los mayores índices de pobreza y los niveles más bajos de conectividad del país) no había ninguno. Esto llevó a un grupo local de personas comprometidas a crear un IXP en el estado de Yucatán.
Sus esfuerzos se intensificaron en 2018, con la firma de un acta constitutiva, y en 2019 organizaron una treintena de reuniones y formaciones, seguidas de un Foro Nacional de IXP y una Asamblea General en 2020. Los dos primeros participantes comenzaron a intercambiar tráfico en noviembre y diciembre. En febrero de 2021 ya eran cuatro, con ocho entidades comprometidas en total.
“Es la historia de cómo se construye Internet, desde sus entrañas, de crear un ecosistema”, explica Carmen Denis Polanco, directora del punto neutro de Internet de Yucatán (IXSY, por sus siglas en inglés). “El IXSY contribuye [a]… promover las condiciones para que Internet sea un instrumento eficaz de inclusión social, innovación, generación de conocimiento y desarrollo social, sanitario, cultural y económico en nuestro estado”.
Las ventajas son ya evidentes: mayor resiliencia y estabilidad, mayor rentabilidad, mejor calidad y menor latencia, así como servicios de valor añadido. Además, el IXSY tiene un preacuerdo para un punto de presencia en Facebook y esperan atraer a otras CDN.
Gilberto Burgos De Santiago, director de Gestión Tecnológica de la Subsecretaría de Tecnologías de la Información y Comunicaciones del Gobierno del estado de Yucatán, considera que el lanzamiento del IXSY en 2020 fue oportuno: “Debido a la naturaleza [de] nuestra región, que sufrió huracanes, tormentas y una pandemia… esto nos ayudó a justificar la importancia de Internet y a seguir trabajando en ello, en beneficio del sector de la salud, el estímulo económico, la seguridad, etc.”.
República Dominicana
En la República Dominicana, una década después de que fracasara la iniciativa de crear un IXP, la filial local de Internet Society reavivó los esfuerzos tras los foros locales de gobernanza de Internet que abordaron la infraestructura.
“Había un gran interés por retomarlo, así que [Internet Society] lo lideró”, dice Osvaldo Larancuent, presidente de la filial.
Se formaron comités técnicos y jurídicos, que prepararon un Memorando de Entendimiento (MoU, por sus siglas en inglés). Paralelamente, la filial pidió una subvención Beyond the Net para proyectos de mediana o gran envergadura y recibió 30.000 dólares en octubre de 2018.
Hasta la fecha, 24 entidades han firmado el Memorando de Entendimiento, entre ellas la Presidencia de la República, dos operadores, cuatro universidades y ocho proveedores y empresas de telecomunicaciones que representan el 98 % del consumo de Internet del país.
El IX.DO comenzó a operar en silencio en noviembre de 2020. Hasta ahora, tres empresas están intercambiando tráfico. Este trimestre, se conectarán los cuatro proveedores más importantes. Además, tres CDN han solicitado unirse, incluidos Google Cache y Amazon World Service, mientras que Facebook ha expresado su interés.
Según Larancuent, los IXP impulsan la transformación digital local: “Los sectores más importantes que pueden beneficiarse de estos sutiles cambios son el sector sanitario, para que la telesalud tenga una mejor capacidad de respuesta, y el sector bancario, que puede tener transacciones financieras más seguras. Y, por supuesto, es clave para las redes informáticas compartidas en el sector académico”.
El Salvador
La historia del punto neutro de El Salvador (IXSal) es la más larga, ya que comenzó en 1999, según su fundador, Lito Ibarra. “Empezó como una utopía”, dice este pionero de Internet de 63 años. Consiguió el apoyo técnico de CABASE (que gestiona la mayoría de los IXP de Argentina); después, se puso en contacto con los proveedores de Internet y convocó reuniones. “La confianza es importante porque estás vinculando a empresas que compiten por los mismos clientes”.
Se organizaron talleres técnicos de IXP, en los que participaron Internet Society y LACNIC. Los operadores parecían interesados pero no se comprometían.
Ibarra no se dio por vencido. Encontró un lugar neutral para alojar el equipo del IXP de forma gratuita, en un centro de datos comercial, DataGuard. Comenzó a recibir donaciones de equipos de Internet Society, LACNIC y otras organizaciones. Y en 2019 contrató a un experto para instalar el IXP. Mientras tanto, las reuniones continuaron.
Actualmente hay cinco proveedores que quieren adherirse, la mayoría pequeños.
“Como empresa, vemos el IXP como un tema de vanguardia y esa integración es importante para nosotros y nuestros clientes”, dice el director general de Telenetwork de El Salvador, Edgar Alvarado.
Dice que permitir que los usuarios suban sus servicios a una nube local impulsará la creación y oferta de más servicios. También cree que el IXP reforzará la conectividad y reducirá los costes: “Entiendo los beneficios para el país, para el usuario final, para el sector estudiantil, ya que prácticamente todas las clases son ahora virtuales. Este proyecto va a traer muchos beneficios”, dice Alvarado.
Pero el IXSal aún no ha empezado a intercambiar tráfico, mientras Ibarra intenta convencer a más proveedores, para empezar con buen pie.
“Tenemos la fiesta organizada: las invitaciones, la música, la orquesta, el local y la comida. Solo falta que lleguen los invitados”, concluye Ibarra con una sonrisa.
Imagen de L’odyssée Belle vía Unsplash